Por sí mis escasos pero leales lectores no se habían dado cuenta, les hago saber que estuve ausente una semana en la que le puse pausa a mi vida para largarme a San Francisco a unas tal vez no merecidas pero si anheladas vacaciones.
Todavía no se como le voy a contar al mundo sobre este frenético periplo que emprendimos el miércoles veintitrés mi amada esposa, mi querida madre y su servilleta a tierras californianas.
Antes de llegar a esas crónicas de nuestro viaje tengo que hacer un importante paréntesis para hacer saber Urbi et Orbi la buena nueva: ¡Habemus Conejitam!
Resulta que justo a la mitad de nuestro viaje como bien lo pronosticó mi mejor amigo el Güero bajo amenaza de mi parte y ya comentadas anteriormente en este espacio; la esperada bebe de los conejos decidió hacer su entrada triunfal a este mundo el pasado sábado veintiséis de septiembre en pleno 60º aniversario de la República Popular de China.
Baste decir que mi domadora y mis papás nos encontrábamos en pleno barrio Chino en San Francisco siendo testigos de un importante desfile cuando mi cuñado el Pelón, quien tiene la difícil tarea de ser el esposo de mi hermana, nos avisó que la Conejita venía en camino ya.
Después de las pronunciadas mentadas y recordatorios de partirle su madre a todos los que colaboraran de alguna forma con el nacimiento de ella y no esperarán a nuestro retorno, nos invadió una súbita alegría y emoción por la llegada de la nueva integrante de la familia.
Para los que no nos conocen, aunque el Güero (papá conejo ahora) y yo no tenemos parentesco alguno; los dos nos hemos escogido el uno al otro como hermanos por lo que la conejita es mi sobrina y fin de la discusión.
La Bebe junto con sus dos kilos setecientos gramos decidió llegar al mundo vía cesarea para seguirle haciendo la vida de cuadritos a su madre quien seguramente preferirá caminar sobre lava hirviendo que volverse a embarazar.
Ana Valeria, ese es el fortísimo nombre de la conejita. Como tu tío te doy la bienvenida a este mundo el cual estoy seguro te encantará.
Verás… en este mundo somos más de seis billones de habitantes. Una disculpa de antemano por tenerlo tan sucio para ti y los de tu generación, pero no te preocupes ya lo estamos limpiando para dejárselos mejor. Sin embargo más adelante tu ayuda será muy importante para hacerlo mejor aún.
Para cuando tú tengas tus ideas de cómo hacerlo, a lo mejor nosotros no las entenderemos y tal vez hasta nos opongamos, pero no te preocupes, es algo normal que la generación anterior no entienda a la que le sigue y viceversa.
Te platico que tenemos muchas cosas muy feas, crisis económicas, ambientales y peor aún de valores; tenemos unos cerdos horribles que se llaman políticos y se dedican solo a hacernos la vida miserable.
Sin embargo te darás cuenta que también tenemos cosas muy buenas por las que vale la pena estar aquí y que hacen que todo lo malo no tenga la menor importancia como por ejemplo el chocolate, el helado, los niños, los animales, nuestra historia y sobretodo la familia y los amigos.
Hay trenes y aviones, hay plantas y flores, hay árboles altísimos que están aquí desde mucho antes que tus abuelos. Tenemos crayolas y muchas hojas en blanco que esperan que tu las dibujes; también hay juegos y carruseles con muchas figuras y te podrás subir en la que más te guste, hay algodones de azúcar y parques.
Tenemos en este mundo lugares y ciudades muy bonitas que ya conocerás. Por ejemplo en esta ciudad que te tocó nacer, tenemos el Cerro de la Silla, las montañas y nuestras fabulosas carnes asadas. Esas nos permiten estar con nuestros seres queridos entorno a una mesa o asador y platicar de muchas cosas.
En este mundo que habitamos en el que tú eres nueva, también tenemos gente de todos colores, blancos, negros, amarillos, rojos y morenos aunque después te darás cuenta que el color no es más que un accesorio que no define a la persona.
Tu eres más afortunada que otros niños que llegan igual que tu. Tienes a tus papás contigo y aunque ahora tengan cara de sopes te quieren muchísimo. Además llegas a una casa nueva de paquete con un cuarto recién pintado solo para ti; tienes a tus abuelos y tus tíos, nos tienes a nosotros que te queremos desde antes que nacieras y todos los días tendrás comida en tu mesa, desafortunadamente no todos los bebes de tu edad pueden decir los mismo.
Tenemos los mares que esperan que los cruces, tenemos los campos que esperan que los camines y un cielo azul que algún día podrás ver de abajo hacia arriba y de arriba hacia abajo.
Esas son solo algunas de las muchas cosas que te esperan aquí, disfrútalo porque algún día te darás cuenta que la verdad no dura mucho.
De dichos, hechos y derechos desechos
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Siempre de los siempres siempres que me recetan un nuevo medicamento
investigo de que va para saber que le meto a mi cuerpo y tener presentes
las consecue...
Hace 5 días
Bienvenida esa coneja !
ResponderEliminary que bueno lo de las vacaciones, eso de vez en cuando viene de maravillas.
Estupenda entrada Mcrow, la disfruté.
Y seguí peleando nomás contra los defensores de la estafa del francés, cuantos más seamos por el mundo desenmascarando a estos ladrones culturales, más pronto se sabrá en el planeta la verdad del Uruguayo Gardel.
Es más, te nombro integrante honorario de la "Caballería Oriental", ejercito virtual defensor de la justicia ...
Un abrazo grande hermano !
Qué bonito Mc, en definitiva todo eso que has nombrado es lo que realmente merece la pena en este mundo, la conejita se encontrará muy a gusto, tendrá amor, tiene mucha suerte y una familia estupenda. Me has hecho pensar en todos aquellos niños que no la tienen..
ResponderEliminarUn beso enorme.
Le hiciste un discurso de bienvenida muy bonito, en plan padre. Se lo podrías haber guardado y dárselo para cuando cumpliera la mayoría de edad.
ResponderEliminarUnrampyabrazo.